Antonio Jiménez Gómez
Luego de permanecer casi tres meses en la cámara frigorífica del Servicio Médico Forense de Chilpancingo, el cadáver del presunto sicario José del Carmen Hernández Reyes, fue reclamado por sus padres.
El responsable del Semefo, Alfonso Ramírez Trinidad, confirmó que el pasado martes 24 de julio, se presentaron los familiares del occiso para reclamar el cadáver el cual les fue entregado.
El funcionario estatal refirió que la noche del pasado lunes 23 de Julio, los señores Apolinar Hernández, de 45 años de edad, y Agustina Reyes, de 40 años, acudieron a las instalaciones del Semefo de Chilpancingo para reclamar el cuerpo de su hijo.
Indico que las personas que reclamaron el cadáver, se identificaron con documentación oficial, refiriendo que trasladarían el cuerpo a su domicilio, ubicado en la calle San Miguel de Adentro, en la cabecera municipal de Jalapa, en el estado de Tabasco.
El responsable del Semefo Chilpancingo señaló que la necropsia de ley que se le practicó a José del Carmen Hernández Reyes, de 29 años de edad, dictaminó que su muerte se debió a un impacto de arma de fuego en el cráneo.
Ramírez Trinidad informó que dicho cadáver permaneció más de 75 días en la congeladora del Semefo de esta ciudad capital, ya que no podía ser depositado en la fosa común, debido a que fue identificado por un familiar el día 10 de mayo.
LA HISTORIA DEL CADAVER
Fue el pasado 9 de mayo cuando un grupo de hombres armados, ataviados como agentes federales de investigación acribillaron al director de Seguridad Publica del Municipio de Chilpancingo Artemio Mejia Chávez.
Luego del crimen, se originó un enfrentamiento a balazos entre los escoltas del comandante cobra y presuntos sicarios, quienes se dieron a la fuga, sin embargo, las heridas de bala que recibió quien fue identificado como José del Carmen Hernández le privaron de la vida.
Los cadáveres del comandante policiaco y del presunto sicario fueron levantados por personal del Semefo, siendo trasladados a la morgue.
Los restos del comandante “Cobra” fueron reclamados ese mismo día por sus familiares para darle cristiana sepultura, mientras que el cadáver de la otra persona.
Tras revisar sus pertenencias, se encontró una credencial que lo identificaba como policía del municipio de Solidaridad en el estado de Quintana Roo y con la cual se logró saber que causó baja el pasado 13 de octubre del 2006.
Dos días después se presentó a la agencia del Ministerio Público del Fuero Común, el hermano de José Carmen Hernández Reyes, quien venía desde Quintana Roo, a reclamar el cadáver de su hermano.
Ese día cuando el pariente se encontraba declarando en la agencia del Ministerio Público del Fuero Común, alrededor de las 13:00 horas, cerca de 15 personas desconocidas que viajaban a bordo de 4 automóviles ingresaron al inmueble.
Al entrar, pidieron a todos los trabajadores de esa área, incluyendo a los agentes del Ministerio Público que se tiraran al suelo, cuando todos estaban sobre el piso, varios sujetos no identificados agarraron al hermano del presunto delincuente y lo sacaron del lugar subiéndolo a una de las unidades en las que viajaban, sin que hasta el momento se sepa de su paradero.
Después de ese día, nadie se había presentado a reclamar el cadáver de José Carmen Reyes Hernández, por lo que personal del Servicio Médico Forense, sólo esperaba la orden del representante social, para llevar el cuerpo a la fosa común.
Sin embargo, los padres del occiso se lo llevaron desde hace más de dos semanas a un pueblo de Tabasco.
Luego de permanecer casi tres meses en la cámara frigorífica del Servicio Médico Forense de Chilpancingo, el cadáver del presunto sicario José del Carmen Hernández Reyes, fue reclamado por sus padres.
El responsable del Semefo, Alfonso Ramírez Trinidad, confirmó que el pasado martes 24 de julio, se presentaron los familiares del occiso para reclamar el cadáver el cual les fue entregado.
El funcionario estatal refirió que la noche del pasado lunes 23 de Julio, los señores Apolinar Hernández, de 45 años de edad, y Agustina Reyes, de 40 años, acudieron a las instalaciones del Semefo de Chilpancingo para reclamar el cuerpo de su hijo.
Indico que las personas que reclamaron el cadáver, se identificaron con documentación oficial, refiriendo que trasladarían el cuerpo a su domicilio, ubicado en la calle San Miguel de Adentro, en la cabecera municipal de Jalapa, en el estado de Tabasco.
El responsable del Semefo Chilpancingo señaló que la necropsia de ley que se le practicó a José del Carmen Hernández Reyes, de 29 años de edad, dictaminó que su muerte se debió a un impacto de arma de fuego en el cráneo.
Ramírez Trinidad informó que dicho cadáver permaneció más de 75 días en la congeladora del Semefo de esta ciudad capital, ya que no podía ser depositado en la fosa común, debido a que fue identificado por un familiar el día 10 de mayo.
LA HISTORIA DEL CADAVER
Fue el pasado 9 de mayo cuando un grupo de hombres armados, ataviados como agentes federales de investigación acribillaron al director de Seguridad Publica del Municipio de Chilpancingo Artemio Mejia Chávez.
Luego del crimen, se originó un enfrentamiento a balazos entre los escoltas del comandante cobra y presuntos sicarios, quienes se dieron a la fuga, sin embargo, las heridas de bala que recibió quien fue identificado como José del Carmen Hernández le privaron de la vida.
Los cadáveres del comandante policiaco y del presunto sicario fueron levantados por personal del Semefo, siendo trasladados a la morgue.
Los restos del comandante “Cobra” fueron reclamados ese mismo día por sus familiares para darle cristiana sepultura, mientras que el cadáver de la otra persona.
Tras revisar sus pertenencias, se encontró una credencial que lo identificaba como policía del municipio de Solidaridad en el estado de Quintana Roo y con la cual se logró saber que causó baja el pasado 13 de octubre del 2006.
Dos días después se presentó a la agencia del Ministerio Público del Fuero Común, el hermano de José Carmen Hernández Reyes, quien venía desde Quintana Roo, a reclamar el cadáver de su hermano.
Ese día cuando el pariente se encontraba declarando en la agencia del Ministerio Público del Fuero Común, alrededor de las 13:00 horas, cerca de 15 personas desconocidas que viajaban a bordo de 4 automóviles ingresaron al inmueble.
Al entrar, pidieron a todos los trabajadores de esa área, incluyendo a los agentes del Ministerio Público que se tiraran al suelo, cuando todos estaban sobre el piso, varios sujetos no identificados agarraron al hermano del presunto delincuente y lo sacaron del lugar subiéndolo a una de las unidades en las que viajaban, sin que hasta el momento se sepa de su paradero.
Después de ese día, nadie se había presentado a reclamar el cadáver de José Carmen Reyes Hernández, por lo que personal del Servicio Médico Forense, sólo esperaba la orden del representante social, para llevar el cuerpo a la fosa común.
Sin embargo, los padres del occiso se lo llevaron desde hace más de dos semanas a un pueblo de Tabasco.
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