Antonio Jiménez Gómez
En Chilpancingo existe en promedio una ambulancia por cada 10 mil habitantes, a pesar de ser la capital del estado, ser la segunda ciudad por tamaño de su población y que los hospitales públicos brindan atención a varios municipios de la Región Centro.
De acuerdo a un conteo realizado por Novedades, el número de automotores dedicados a la transportación de personas en caso de accidente o emergencia es de menos de 20 en promedio en la capital del estado, que de acuerdo al último conteo poblacional cuenta con 214 mil habitantes.
Es decir, que en caso de un accidente o incidente de grandes dimensiones podrían enfrentarse problemas de traslado de las víctimas a centros de atención hospitalaria.
Apenas la madrugada del pasado martes, autobús de la línea futura que había salido de Acapulco con dirección a la Ciudad de México, se accidentó en la Autopista del Sol.
La volcadura de la unidad que se precipitó a un barranco de por lo menos 40 metros no dejó heridos de gravedad; sin embargo, la situación pudo haber sido diferente.
Para la subsecretaría de Protección Civil, Nubia Sáyago González, el hecho de que haya pocas ambulancias en Chilpancingo, no implica necesariamente que se tenga que dar un mal servicio para la atención de una emergencia.
EL RECUENTO
De acuerdo a fuentes de diversas instituciones hospitalarias de la ciudad, las ambulancias que se encuentran listas de forma cotidiana para atender una contingencia de mediana o gran magnitud, son pocas.
La Cruz Roja tiene en promedio entre 3 y 5 unidades disponibles, el IMSS 3, el ISSSTE 2, la Secretaría de Salud dispondría hasta de cuatro vehículos, el ayuntamiento y Protección Civil estatal una ambulancia cada uno, y instituciones privadas tienen en promedio 2 unidades.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, los resultados del conteo poblacional que se realizó en el 2005 arrojaron que de entre los nueve municipios que concentran la mitad de la población total del estado, Chilpancingo se encuentra en segundo lugar con 214 mil habitantes.
Es decir, que a partir de la estancia en promedio de entre 18 y 20 ambulancias de forma permanente en la ciudad, implica que hay una unidad de atención a emergencias por cada 12 mil habitantes.
RIESGOS CONTROLADOS
Para la subsecretaría de Protección Civil, Nubia Sáyago González, la situación si bien es preocupante, porque podría hacer falta vehículos para la atención de los afectados por alguna emergencia de mediana magnitud, indicó que hay maneras de contrarrestar esa carencia.
Además, estableció que cuando ocurre algún problema que requiere del empleo de unidades especiales para el traslado de heridos a instituciones hospitalarias, se da un fenómeno de solidaridad y apoyo de forma tal que hay vehículos disponibles para atender los problemas más urgentes.
Por otra parte, indicó que cuando ocurre un accidente de gran magnitud que implica la existencia de un gran número de personas heridas, se aplica el método denominado “triage”.
El término de origen francés implica atender al mayor número de pacientes de manera adecuada y en el menor tiempo, reveló la funcionaria estatal, quien trabajó durante varios años en la Cruz Roja Mexicana.
Sáyago González estableció que ante una situación de crisis, los socorristas o médicos más especializados que cubran el incidente, hacen una clasificación de la gravedad de los heridos, asignándoles un color que va desde los que sufrieron daños leves, hasta quienes se encuentran en situación más grave: verde, amarillo, rojo y negro.
“No sólo consideras la gravedad de las lesiones, sino también el grado de sobrevivencia. Son situaciones muy duras porque se deben tomar decisiones, pero en ese momento lo que importa es salvar el mayor número de vidas”, refirió.
Estableció que en los casos de incidentes donde haya más de 40 heridos, se aplica dicho método de manejo de la situación, y los resultados hasta el momento han sido positivos.
En Chilpancingo existe en promedio una ambulancia por cada 10 mil habitantes, a pesar de ser la capital del estado, ser la segunda ciudad por tamaño de su población y que los hospitales públicos brindan atención a varios municipios de la Región Centro.
De acuerdo a un conteo realizado por Novedades, el número de automotores dedicados a la transportación de personas en caso de accidente o emergencia es de menos de 20 en promedio en la capital del estado, que de acuerdo al último conteo poblacional cuenta con 214 mil habitantes.
Es decir, que en caso de un accidente o incidente de grandes dimensiones podrían enfrentarse problemas de traslado de las víctimas a centros de atención hospitalaria.
Apenas la madrugada del pasado martes, autobús de la línea futura que había salido de Acapulco con dirección a la Ciudad de México, se accidentó en la Autopista del Sol.
La volcadura de la unidad que se precipitó a un barranco de por lo menos 40 metros no dejó heridos de gravedad; sin embargo, la situación pudo haber sido diferente.
Para la subsecretaría de Protección Civil, Nubia Sáyago González, el hecho de que haya pocas ambulancias en Chilpancingo, no implica necesariamente que se tenga que dar un mal servicio para la atención de una emergencia.
EL RECUENTO
De acuerdo a fuentes de diversas instituciones hospitalarias de la ciudad, las ambulancias que se encuentran listas de forma cotidiana para atender una contingencia de mediana o gran magnitud, son pocas.
La Cruz Roja tiene en promedio entre 3 y 5 unidades disponibles, el IMSS 3, el ISSSTE 2, la Secretaría de Salud dispondría hasta de cuatro vehículos, el ayuntamiento y Protección Civil estatal una ambulancia cada uno, y instituciones privadas tienen en promedio 2 unidades.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, los resultados del conteo poblacional que se realizó en el 2005 arrojaron que de entre los nueve municipios que concentran la mitad de la población total del estado, Chilpancingo se encuentra en segundo lugar con 214 mil habitantes.
Es decir, que a partir de la estancia en promedio de entre 18 y 20 ambulancias de forma permanente en la ciudad, implica que hay una unidad de atención a emergencias por cada 12 mil habitantes.
RIESGOS CONTROLADOS
Para la subsecretaría de Protección Civil, Nubia Sáyago González, la situación si bien es preocupante, porque podría hacer falta vehículos para la atención de los afectados por alguna emergencia de mediana magnitud, indicó que hay maneras de contrarrestar esa carencia.
Además, estableció que cuando ocurre algún problema que requiere del empleo de unidades especiales para el traslado de heridos a instituciones hospitalarias, se da un fenómeno de solidaridad y apoyo de forma tal que hay vehículos disponibles para atender los problemas más urgentes.
Por otra parte, indicó que cuando ocurre un accidente de gran magnitud que implica la existencia de un gran número de personas heridas, se aplica el método denominado “triage”.
El término de origen francés implica atender al mayor número de pacientes de manera adecuada y en el menor tiempo, reveló la funcionaria estatal, quien trabajó durante varios años en la Cruz Roja Mexicana.
Sáyago González estableció que ante una situación de crisis, los socorristas o médicos más especializados que cubran el incidente, hacen una clasificación de la gravedad de los heridos, asignándoles un color que va desde los que sufrieron daños leves, hasta quienes se encuentran en situación más grave: verde, amarillo, rojo y negro.
“No sólo consideras la gravedad de las lesiones, sino también el grado de sobrevivencia. Son situaciones muy duras porque se deben tomar decisiones, pero en ese momento lo que importa es salvar el mayor número de vidas”, refirió.
Estableció que en los casos de incidentes donde haya más de 40 heridos, se aplica dicho método de manejo de la situación, y los resultados hasta el momento han sido positivos.
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